No existe nadie perfecto en este mundo, tanto tú, como yo, como muchas de miles de personas tienen y tenemos virtudes y defectos, solo hay que saber sopesar unos y otros en una balanza, la balanza del corazón, y éste nos dirá si esos defectos ponen impedimento a la vida, o son menos importantes al lado de esas virtudes que tanto nos agradan.
Yo, de momento, al menos a día de hoy y a pesar de todo, puedo decir que los defectos se ven pequeños al lado de las virtudes...tal vez por eso sigo aquí...tal vez por eso elegí tus defectos y no uno de esas miles de personas.
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